Pendiendo sobre pueblos
Corriendo por las calles mientras jadeo; fuera Ares y su canto de bombardeo. Fobos y Deimos, entre el aquí y el allá. Por favor, que paren y que sea ya.
Mis hermanos fueron carne de cañón, mientras otros bolsos pesan un montón; claramente, no de conciencia, sino oro. Y todo lo que queda, un callado lloro.